Hoy vamos a ver un ejemplo de estrategia del océano azul: El Chef del Mar. Hace poco vimos en el blog precisamente en qué consistía dicha estrategia del océano azul en marketing y con el ejemplo de hoy pienso que queda perfectamente ilustrada la parte teórica, ya que es un caso real fascinante, atrevido y realmente diferente.
Angel León es El Chef del Mar
Un posicionamiento único logrado gracias a su especialización en productos del mar llevados magistralmente a una cocina que recoge adjetivos a su estilo como singular, radical, arriesgado o estridente, algo que no está alineado con el gusto general del público.
Con dos estrellas Michelin, su restaurante Aponiente es pura vanguardia marítima, con platos llenos de sofisticación que le han llevado a crear ese océano azul.
En un mundo como el de la gastronomía, no es fácil salir del océano rojo, en el que que compiten la mayoría de chefs. Salir de él precisa de una estrategia clara y definida, de un camino, de un plan (que no tiene por qué seguirse al pié de la letra).
Más que saber buscar lo que se quiere es saber encontrar lo que se quiere y aquí la definición de Angel León es perfecta: El Chef del Mar. Bajo este concepto se cumplen las dos premisas fundamentales de esta estrategia de marketing:
- Segmentación: hacia un público que ama los productos del mar y que además busca es riesgo y atrevimiento, quiere ser sorprendido y huir de lo convencional al límite, un nicho de mercado quizás reducido, pero que te da absolutamente todo si te conviertes en su referencia
- Posicionamiento: la propia segmentación le proyecta hacia una posición de privilegio en un nicho específico en el que será difícil que otro competidor le haga sombra, ya que este camino implica que la creatividad y la innovación sean variables estratégicas constantes
Enhorabuena Angel, por darnos este gran ejemplo y, por supuesto, por crear una cocina tan maravillosa e impactante.
Photo credit: Angel León