Júzcar, el Pueblo Pitufo, ante un reto trascendental: reinventarse

Hoy quiero hablaros de un lugar especial que se encuentra en un momento especial, que no es otro que Júzcar, el Pueblo Pitufo, ante un reto trascendental: reinventarse.

El pueblo malagueño de Júzcar se dio a conocer al mundo por ser «el primer pueblo pitufo del mundo».

Con una población cercana a los 300 habitantes (INE, 2016), este pequeño pero encantador lugar cambió su tranquilidad por un gran impacto: el 16 de junio de 2011 se celebró en el pueblo el estreno mundial de la película de Los Pitufos.

Gracias a una agencia publicitaria colaboradora en el lanzamiento de la película con Sony Pictures, surgió una fantástica idea: teñir de «azul pitufo» todas las casa de Júzcar.

Fue tal la repercusión mediática de esta acción que tras medio año, el 18 de diciembre de 2011, los juzcareños decidieron en una consulta popular prorrogar la pintura azul de sus casas, olvidando el habitual color blanco de esta zona andaluza.

Desde entonces, Júzcar se convirtió en un peculiar destino para muchas personas que llevadas por la curiosidad han visitado el lugar, han compartido los momentos allí vividos y han aportado su granito a su exitosa promoción turística

Son innumerables las referencias digitales en la red y las imágenes en cualquier red social y en el propio Google. Sin duda, Júzcar ha alcanzado un posicionamiento de privilegio a escala mundial.

Júzcar, el Pueblo Pitufo, ante un reto trascendental: reinventarse
Júzcar, el Pueblo Pitufo, ante un reto trascendental: reinventarse

Ahora, el 15 de agosto de 2017, todo cambia. Júzcar debe de dejar de ser «el Pueblo Pitufo». El motivo es que los herederos del creador de estos entrañables personajes azules quieren cobrar al municipio derechos de imagen y éste se niega por completo al pago.

He aquí la amenaza: dejar de ser «el Pueblo Pitufo«, dejar de ser un reclamo de primer nivel y posiblemente volver a caer en el olvido siendo un lugar más.

Pero ante toda amenaza, siempre existe una oportunidad. Por una parte, el municipio ha adquirido un know how global para todos sus habitantes muy interesante, que debe poner en valor para buscar a un sustituto de calidad que sea quien abandere un nuevo proyecto para el lugar.

Por otra parte, se abre una excepcional oportunidad para las marcas. ¿Y si una marca asociada al color azul u otro color aprovechara el momento?

Tenemos ante nosotros un insight fabuloso: la oportunidad de reconquistar un lugar icónico y convertirlo en un nuevo territorio asociado a una marca, sea del segmento que sea.

Existen grandes marcas mundiales vinculadas al color azul, pero insisto, ¿por qué no una marca vinculada a cualquier otro color?

Probablemente, esta última opción puede ser incluso más interesante e impactante. La proyección mediática de una apuesta de este tipo estaría asegurada y la marca podría diseñar un plan estratégico para el lugar que le aportara multitud de beneficios en muchos sentidos, desde lo económico a los social, pasando por otros muchos aspectos.

Sin duda, si todo este planteamiento se hiciera realidad sería fundamental basar en compromiso por ambas partes en una estrategia win-win. Marcas del mundo: Júzcar es un lugar único donde generar emociones únicas!

Photo credit: AJ

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