Hoy os describiré en técnicas de creatividad: cartas retadoras, una técnica genial, como todas las incluidas en Gamestorming.
¿En qué consiste?
Se usa para afrontar retos, problemas y posibles barreras que nos podemos encontrar en enfoque de productos, servicios o estrategias.
Es ideal para grupos poco numerosos, por ejemplo de entre 5 y 10 personas.
¿Qué beneficios tiene?
El método propone diversos escenarios o alternativas bajo un enfoque de productos, servicios o estrategias. Su planteamiento competitivo (vamos a comprobar lo ideal de partir el grupo en dos para que haya competición) provoca una gran implicación entre los participantes.
¿Cómo se aplica?
A continuación, os detallo los pasos a seguir:
1. Dividimos el grupo en dos subgrupos, asignándole a uno de ellos la misión de «grupo de la solución«, que trabajará los puntos fuertes del producto o servicio. Por su parte, el otro grupo tendrá la misión de ser el «grupo del reto» que trabajará los problemas potenciales a los que se enfrenta el producto o servicio.
2. Cada grupo trabajará sin que el otro sepa nada de lo que están haciendo. Ambos van creando cartas con cada una de las propuestas que vayan surgiendo
3. Ahora a jugar! El grupo del reto escoge una carta de su montón, la visualiza e intenta narrar una historia lo más realista posible basada en el problema descrito en la carta. Después el grupo de la solución escoge una carta de su montón y si lo que ha salido aporta una solución ganará un punto, mientras que si no la tiene el punto lo obtendrá el equipo contrario. Se marca un número de puntos tope o bien si se encuentran varias soluciones se cierra el juego.
Esta técnica, incluida en Gamestorming, está basada en la pura competición.