En momento de inicio de algo (un nuevo trabajo, un nuevo desempeño, un nuevo año, etc.) es importante tener limpia tu mente y focalizar aspectos clave. Por este motivo, hoy quiero hablarte sobre 3 tips para un buen arranque: se positivo, se honesto, se profesional.
Se positivo
Hemos de ser positivos siempre, aunque nos cueste, aunque la situación no lo permita. El entorno que nos rodea ya se encarga solito de lo negativo.
Para ser positivo hay una premisa imprescindible: aparta de tu camino todo aquello en lo que no puedas incidir, en lo que tu opinión o participación no tenga influencia. Guarda e invierte esa energía en aquello donde tu rol se determinante.
Simple, ¿no? Lo complicado es ejecutarlo, por tanto te invito a ello.
Se honesto
La honestidad es, simplemente, el valor de decir la verdad. Es una cualidad humana consistente en actuar en función de cómo pensamos y sentimos, que proyecta respeto e implicación con nosotros mismos y con la sociedad.
Ser honesto hoy es muy caro, dado que el nivel competitivo en casi cualquier campo laboral es muy alto y complejo. Como seres humanos, tendemos a activar nuestro sentido de supervivencia ante situaciones críticas y éstas pueden llevarnos a aparcar la honradez.
Yo te invito a ser honesto, pues aunque pienses de inmediato que podías no haberlo sido para conseguir algo, el tiempo te dará la razón.
Se profesional
Por último, destacaría algo obvio. Ser profesional empieza por crear los motivos para serlo. Para mí, lo primero es tener claro qué quieres ser, de lo contrario, ¿cómo podríamos saber los motivos?
Enfoque, objetivos, capacidad de mejora. Ser un profesional cada día pasa por ser consciente de que realmente amas lo que haces y eso te lleva transmitirlo apasionadamente en cada palabra y en cada gesto.
Solo así logras convencer a los demás.
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