Os traigo una nueva entrada para la serie de post dedicada a conceptos de tendencia en el nuevo consumidor: Trendy.
Se trata de una palabra que en los últimos tiempos está incrementando su uso en nuestro lenguaje.
Trendy es consecuencia de “trend“, que podemos traducir como tendencia, es decir, que está en niveles de popularidad.
Decir que algo es trendy es decir que ese algo está de tendencia o, incluso de moda.
Quizás sería interesante comprobar las diferencias entre novedad, tendencia y moda que comentamos en un post anterior (clic aquí para acceder).
Este concepto posee numerosos usos, tanto para referirnos a personas como a cosas. Podemos adjetivar a alguien como trendy o podemos hacerlo para referirnos a algo.
Trendy es un adjetivo que posee connotaciones positivas
Cuando decimos que algo o alguien es trendy, estamos reconociendo que tiene algo destacable en el momento actual.
No debemos confundir el concepto con “fashionable“, ya que esta palabra se utiliza únicamente en el ámbito de la moda.
Aunque al final, las reglas no escritas hacen que todos estos anglicismos que se han implantado en nuestro idioma castellano se usen en casi cualquier contexto, aunque sea erróneo.
Existe otro anglicismo que suele confundirse con trendy. Nos referimos «cool». La diferencia básica es que trendy está referido a algo de tendencia.
Alguien o algo calificado como cool no sigue las tendencias, pero posee un singular estilo de modernidad atemporal.
Trendy es un adjetivo adorable, ya que su uso suele estar acompañado de toques suaves e incluso en ocasiones de admiración.
Es evidente que en función del tono empleado, también podríamos interpretar que se está haciendo un uso peyorativo del adjetivo hacia algo o hacia alguien.
Esto puede ocurrir con todos los adjetivos, ya que el arte de comunicar permite jugar con la ironía.
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