Os traigo un nuevo fenómeno para hacernos pensar. Se trata del denominado efecto punto ciego y su influencia en la estrategia de marketing.
Es curioso, pero el ser humano no puede reconocer las distorsiones cognitivas de sí mismo.
Y, justamente eso, es el efecto punto ciego. Tendemos a percibir los errores en el comportamiento de los demás, pero solemos ignorar los nuestros propios.
Esto ocurre incluso con nuestros propios errores mas obvios. Ahora piensa, ¿te ha ocurrido alguna vez esto?
Se que cuesta reconocer, pero al menos a ti mismo si te ha ocurrido, es bueno reconocerlo y ser consciente de ello.
Efecto punto ciego y su influencia en la estrategia de marketing
En las empresas, vemos que los puntos ciegos representan un desajuste entre las percepciones de quienes toman decisiones y la realidad del escenario competitivo.
Los puntos ciegos pueden ocasionar serios errores estratégicos. Lo dramático es que al igual que ocurre en el plano individual, en la empresa son muy difíciles de evitar o eliminar.
Éstos son parte intrínseca de la dinámica empresarial.
Dicho esto, existe un método basado en una variante de las hipótesis competitivas de Richard Heuer.
Se fundamenta en la comprobación, a través de evidencia, de los fundamentos utilizados por los directivos.
Concretamente, a la hora de definir las fortalezas, debilidades y ventajas competitivas de la empresa.
Por tanto, testar las hipótesis sobre el posicionamiento competitivo puede ayudar a reducir puntos ciegos que causan graves errores estratégicos.
En resumen, el ambiente interno de la empresa e incluso del sector no deja ver estos puntos ciegos. A veces es necesario el aporte de una visión externa de contraste.
Las empresas suelen ser, además, prisioneras de su propia dinámica e inercia, por lo que es complicado ver la paja en el ojo, aunque sí se vea en el ojo ajeno.
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