Hoy os traigo un ejemplo curioso de sensaciones auditivas en marketing. ¿A qué me refiero? Cuando percibimos de forma visual una marca, sabemos distinguirla e identificarla perfectamente (no entro a valorar si la conocemos o no).
Sin embargo, cuando la escuchamos, es decir, cuando oímos en nombre de una marca la cosa pueda cambiar. El ejemplo que voy a utilizar es bastante reciente y la marca en cuestión es Codornew.
Como se que gran parte de los lectores de este blog no son españoles, os pongo en antecedentes. La marca matriz de esta nueva marca se llama Codorníu y es muy conocida, sobre todo en época navideña, ya que es uno de los cavas (vino espumoso elaborado por un método tradicional) más asentados en nuestro país.
Esta nueva marca busca a una tipología de consumidor joven, de entre 25 a 40 años, por lo que ha lanzado un producto denominado Frizz 5,5. Es un vino blanco frizzante (de burbuja) con baja graduación, en dos conocidísimas variedades de uva: albariño y verdejo.
Fonéticamente, siempre y cuando respetemos la pronunciación en inglés de Codornew, ambas suenan igual. Y, aquí viene el debate. ¿Es coherente usar esta marca nueva bajo esta composición?
¿Es malo que ambas se confundan fonéticamente generando controversia?
¿O es bueno que una marca recuerde a la otra mediante esta estrategia? En realidad, la marca del producto parece ser Frizz, 5.5. Aunque en las botellas siempre aparece arropando a esta denominación la marca Codornew, que supongo dará cobijo a futuras novedades en cuanto a variaciones del tipo de uva en forma de nuevos sabores.
Todo resulta cuanto menos curioso. Por una parte una aparente confusión, por otra parte una identificación perfecta, inequívoca e inmediata de la marca matriz.
En estos casos de sensaciones auditivas en marketing, debemos analizar con perspectiva el caso y, sobre todo aprender de ello, sacar lo bueno y lo malo para valorar de cara a futuros casos que se puedan presentar para trabajarlos con el mejor enfoque posible.
Espero haberte hecho pensar.
Video & photo credit: Codorniu
2 comentarios
Me gusta esta estrategia!!! Pienso que es acertada a la hora de buscar un público más joven, por lo de la pronunciación es una coincidencia que les favorece y han aprovechado para captar otro tipo de clientes.
Ahora bien, si pensamos en los clientes tradicionales podría causar rechazo a la hora de la elección (voluntaria y consciente), pero como imagino que van a mantener las dos marcas y productos diferentes, no veo ningún problema y creo que va beneficiar la marca.
Gracias Raul, la verdad es que es un caso que me ha llamado mucho la atención, un saludo!