Iniciamos una nueva serie de post en la que vamos a desarrollar ejemplos de estrategias y tácticas Growth Hacking: Efecto WOW.
Se trata de la percepción individual o colectiva de fascinarse, emocionarse o impactarse por algo.
Cuando algo deja de ser ordinario y pasa a ser extraordinario tenemos el escenario perfecto para que suceda el denominado efecto WOW.
Entre tanta oferta disponible y tantas marcas comunicando, lograr un efecto WOW no es nada sencillo.
Eso si, es importante echar mano del principio «menos es más«, pues ya sabemos que los pequeños detalles marcan la diferencia.
Para diseñar un efecto WOW consistente, debemos tener un conocimiento profundo de nuestro target
Ejemplos de estrategias y tácticas Growth Hacking: Efecto WOW
A pesar de ser una de las mejores acciones para sorprender al público es una técnica poco utilizada.
La clave para su éxito es ofrecer al usuario más de lo que espera (incluso es genial si no lo espera), sin pedir nada a cambio.
¿Qué características son las ideales para que logre impactar?
Lo primero es que se original, novedoso, diferente. Eso hará que quede asociado a la maca y sea recordado.
Para ello, me gusta pensar en el concepto «memorable«. ES decir, toda propuesta que podamos plantear, debería pasar este filtro.
Por supuesto, que cuente con un equilibrio funcional y emocional.
Si solo es funcional, se olvidará pronto. Si solo es emocional, la intensidad solo se concentrará en el momento.
El elemento sorpresa es, sin duda, lo que más puede despertar esa sensación chispeante en el usuario o consumidor que tanto necesita una marca.
Este puede llegar con sencillas maniobras. El mundo digital nos ofrece muchas posibilidades gracias a su ámbito bidireccional.
Un ebook gratuito e inesperado a cualquier usuario fiel es un simple ejemplo de cómo crear este tipo de acciones. ¿Otros ejemplos?
Si tu compañía móvil te aumenta los megas para navegar sin habérselo pedido o si el portal de viajes en el que te has registrado te envía un código descuento tras hacerlo.
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