Continuamos con la serie de post en los que estamos visualizando estímulos. En esta ocasión es el turno para estímulos y su influencia en la estrategia de marketing: Sensoriales.
Cuando hablamos de estímulos sensoriales hacemos alusión a la entrada de información del entorno exterior hacia nuestro sistema nervioso a través de los sentidos, escenario que origina la aparición de sensaciones y percepciones.
Este hecho representa la primera etapa en cuanto al desarrollo de nuestras funciones cognitivas básicas, es decir, atención y memoria, permitiendo además el desarrollo de las funciones cognitivas superiores, como la resolución de problemas, el razonamiento, el lenguaje y la creatividad.
Cuando captamos este tipo de estímulos estamos arrancando el proceso de memoria, en el que la atención y la percepción desempeñan el rol fundamental para, posteriormente, utilizar la información almacenada para operar y razonar.
Aunando todo lo que recibimos a través de los sentidos y analizando nuestro entorno a través del movimiento, sucede el proceso de asimilación y acomodación, que favorece la generación de aprendizaje y la comprensión del mundo que nos rodea.
Llegados a este punto, os recomiendo la lectura de estos dos post anteriores relacionados con el mundo de los sentidos:
Los sentidos en la estrategia de marketing
Seducir al consumidor a través de los sentidos
Para las marcas, se presenta una enorme oportunidad con el aprovechamiento de la riqueza de este tipo de estímulos sensoriales.
A través de los receptores de estímulos corporales (ojos, nariz, lengua, piel y oídos) tenemos puertas de entrada hacia la generación de sensaciones y percepciones en el consumidor objetivo.
Estas estructuras sensoriales son las encargadas de captar todos los estímulos que llegan desde el exterior y de su procesamiento.
El marketing sensorial posee un nivel de desarrollo muy alto y apenas estamos empezando a descubrirlo. Dale una oportunidad a tu marca e intenta aprovecharlo.
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