Ojalá todas las ideas que traigo para esta sección os inspiren a provocar ideas que aplicar a vuestros proyectos. Hoy, una nueva entrega en productos singulares: Gold by Aussiebum los slip más caros del mundo.
AussieBum es una marca australiana que con una materia prima especial, un hilo que de poliéster y lycra cubierto de oro de 24 quilates, ha creado este producto lanza tan llamativo: los calzoncillos más exclusivos del mundo.
Su precio, 10.000 € el slip. AussieBum posee muchos tipos de slips, a precios convencionales de mercado, pero este producto es esa llamada a la acción que provoca precisamente que se hable de la marca y, por tanto, muchos usuarios la descubramos.
El ostentoso producto es uno de esos ejemplos que no deja indiferente: unos pensarán que vaya tontería y otros alucinarán con la tontería. Yo soy de los segundos. Me fascinan las marcas que poseen este tipo de atrevimiento.
Como siempre digo en este blog, este tipo de productos no tiene por qué ser rentable, simplemente es un reclamo emocional para lograr lo que en el marketing de hoy es el reto más difícil: captar la atención del consumidor.
Basado en una estrategia de unicidad, el claim es más que provocador: los calzoncillos más caros y exclusivos del mundo.
El componente del oro justifica la llamada a la acción vía precio, pero también fundamenta el storytelling del producto en relación con la historia de Australia y la conocida Fiebre del Oro que sufrió tiempos atrás.
AussieBum es ya conocida por un motivo muy concreto que ha venido aplicando a su producto, ya que su diseño potencia el efecto visual de los atributos masculinos.
De hecho, la marca ya lanzó hace años un modelo llamado WonderJock, que pretendía generar una similitud con el concepto Wonderbra, basado en un corte especial y una bolsa con el objetivo de elevar y marcar los genitales masculinos.
Para este modelo llamado Gold, la marca ha aplicado una tecnología denominada EnlargeIT, que representa una evolución del sistema WonderJock, en este caso que potencia la comodidad.
En fin, puro deseo.
Photo credit: GAB