Hoy os traigo una nueva entrada perteneciente a una la serie de post con el objetivo de conocer la historia, origen y curiosidades de marcas que marcan: Fred Perry.
Hablamos de una marca que ha fascinado, fascina y fascinará a multitud de tribus urbanas pertenecientes a distintas generaciones.
Fred Perry fue tenista profesional, llegando a convertirse en un mito de este deporte, y empresario del sector textil dejando como legado esta mítica marca.
Nació en el norte de Inglaterra, con origen de familia obrera. Su padre trabajaba en la industria textil y la familia tuvo que moverse a Londres a trabajar, donde Fred descubrió el tenis, un deporte que solo practicaba la gente de élite de la época.
Ansioso por jugar, se presentó en un torneo donde participaban solamente niños que se lo podían permitir, por lo que la organización rechazó que el pudiera hacerlo.
Lejos de rendirse, su empeño y el favor de un amigo familiar, hicieron posible su participación en nombre de una escuela privada.
Perry fue campeón mundial de tenis de mesa en 1929, aunque posteriormente se centró en el tenis.
En 1933 lideró al equipo de Copa Davis que ganaría cuatro títulos de forma consecutiva y su legado en el final de su carrera deportiva derivó en 8 torneos Grand Slam en sus vitrinas, siendo el primer tenista del mundo en conseguir los 4 grandes torneos (Open de Australia, US Open, Roland Garros y Winbledon).
Perry se enamoró de EE.UU. y se marchó a vivir al país. En 1941, una vez ya retirado, conoció por casualidad en Wimbledon a Tibby Wegner, quien mostraba a los jugadores un singular invento: una muñequera para retirar el sudor de la frente.
Ambos crearon una sociedad y fundaron la marca Fred Perry, que comenzó vendiendo estas muñequeras.
Poco tiempo después lanzaron el producto más popular de la marca: los polos en tela piqué, que durante todos estos años ha sido todo un icono mundial.
Fred Perry mantuvo desde sus inicios mucha cercanía por las clases trabajadoras y las tribus urbanas, de hecho se dice que fueron los mods quienes solicitaron a Perry polos de distintos colores, siendo los primeros en popularizar la marca.
Su emblemática corona de laurel, un isotipo patrimonio de la marca, fue creado por Wegner, en honor a la corona que recibían los vencedores en la Grecia clásica.
Las zapatillas deportivas con la corona de laurel y las cazadoras Harrington con forro de tartán fueron otros productos de alta relevancia para la marca.
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