Hoy os traigo un post de curiosidades: Insights y tendencias en el mundo del vino a tener en cuenta.
Un segmento de mercado que me encanta, que poco a poco se va desencorsetando y que ofrece multitud de variantes
Qué interesante es este mundo, que posee la simbiosis entre lo tradicional y lo moderno.
Hay muchas opciones por explorar, sobre todo teniendo en cuenta que debemos conocer profundamente los gustos y preferencias de cada grupo de consumidores.
Creo que es un producto que debe de equilibrar su estatus y no poner barreras, es decir, que se convierta en algo más democrático y no solo para entendidos de vino.
No hablo de precio, sino de apertura al sabor. No puede ser que te sientas mal a la hora de pedir un vino si no sabes de vinos.
Primera tendencia: VEGANOS
Está aumentando la elaboración de vinos que no emplean productos derivados de animales.
De hecho, algunos clarificantes, como la albumina de huevo o la caseína de la leche, dejan paso a productos de origen vegetal como las proteínas de trigo o de guisante.
Segunda tendencia: BAJA GRADUACIÓN
El cambio climático interfiere en el aumento de la graduación de los vinos, mientras que las tendencias en alimentación parecen girar hacia propuestas ligeras.
Sin duda, los vinos de menor graduación van a adquirir protagonismo, lo que debe beneficiar a regiones más frías o a viñedos plantados en altitud.
Tercera tendencia: EN LATA
Aunque culturalmente para nosotros suena muy raro, en otros mercados es una realidad creciente, sobre todo para el nuevo consumidor.
Es sólo cuestión de tiempo que la lata se gane un hueco de cierto tamaño en el mercado.
Cuarta tendencia: REGRESO DE LOS CLÁSICOS
Después de algunas innovaciones que generan controversia, como los vinos de colores u otros conceptos (como este vino azul), una parte del mercado anhela lo clásico.
La madera y las elaboraciones de estilo más tradicional siempre van a tener su espacio privilegiado.
Quinta tendencia: AUTÓCTONOS
Poco a poco, las variedades autóctonas locales se van convirtiendo en importantes puntas de lanza en busca de la diferenciación.
Es una oportunidad que hace de un territorio un lugar único, que da como resultado un vino único.
Sexta tendencia: ROSADOS
Creo que es el gran desconocido y el gran maltratado como vino. Estar entre el blanco y el tinto no le ha favorecido y se ha etiquetado indebidamente muchas veces.
Hay rosados majestuosos, especiales, bien en forma de vino o de espumoso. Démosle una oportunidad.
En resumen, se trata de un segmento que está explotando poco a poco y que las nuevas generaciones de consumidores condicionarán.
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