Vaya palabro, eh? Procrastinar es un arte y está relacionado con la postergación o posposición de actividades o situaciones que debemos atender de inmediato, sustituyéndolas por otras situaciones más irrelevantes o agradables. Así de sencillo. Hablemos sobre la procrastinación en la estrategia de marketing.
Un arte, porque de aquella manera nos inventamos constante excusas para postergar aquello que de forma inmediata debemos atender. Nos buscamos cualquier asunto que resulta ser un sustituto perfecto para no hacer lo que debíamos hacer.
En este fantástico y divertido video puedes ver perfectamente de que va esto del arte de postergar, pura procrastinación:
La procrastinación puede ser un trastorno de nuestro comportamiento
Su origen radica en la asociación de la acción a realizar con el cambio, el dolor o la incomodidad (estrés). Las tareas pendientes de cumplimiento generan un estado de ansiedad que nos provoca una pereza excesiva a nuestro de por si perezoso cerebro. Aquello que postergamos puede ser percibido por nuestro cerebro como algo realmente abrumador, desafiante, inquietante, peligroso, difícil, tedioso o aburrido.
De esta forma, el propio cerebro y nuestro autodiálogo conforman que todo se aplace, buscando la excusa perfecta para ello. Ya lo decía el refrán: no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. Siempre sabios consejos los de nuestro refranero.
La procrastinación siempre nos induce a generarnos problemas a largo plazo, ya que nos acostumbramos a este tipo de comportamiento y nos autoconvencemos de que luego lo haremos. Un luego que sigue siendo luego cuando volvemos a enfrentarnos a la situación.
Qué peligrosa es la procrastinación, tan peligrosa como su propio poder de convicción, intenso, constante y simple. La lucha contra ella es complicada y requiere de muchas dosis de autoexigencia, disciplina y actitud positiva. Creo que todos hemos sido o somos víctimas de ella, pero recuerda que podemos vencerla. A por ella!
Video credit: Pablo Arribas
4 comentarios
Sí que es todo un arte el de poner excusas para no hacer algo.
En un curso de gestión del tiempo vimos, con un vídeo de Elsa Punset en El Hormiguero (y un poquito de teoría), la técnica de «Sólo unos minutos», basada en que al cerebro no le gusta dejar las cosas a medias y por tanto si nos engañamos y decimos: «Voy a hacer esta cosa sólo unos minutos y después vuelvo al descanso», al final tendremos que acabar la actividad para estar tranquilos y sin esa ansiedad que se genera. Sin saber qué significaba, es una técnica que me ha servido mucho desde que estudiaba. Aunque, por supuesto, la disciplina y la actitud son lo más importante, pero para eso tenemos que conocernos muy bien.
Excelente aporte Montse, muchísimas gracias, me encanta!
Excelente post bro!. Lucho cada día por vencerla, es una de mis debilidades 🙁 Abrazote y hasta muy pronto!
Dale bro! A por ello!