La sonrisa nos desinhibe

Puede que una simple sonrisa en medio de una reunión importante sea la clave estratégica de todo. La sonrisa nos desinhibe y sobre todo explota como ninguna otra cosa los aspectos funcionales y emocionales de cualquier cosa.

Cuando te ven sonreír y más aún cuando hemos estado un tiempo con alguien riendo, nuestro comportamiento tiende a generar un índice de confianza y confidencialidad muy alto. Es muy probable que incluso podamos revelarles aspectos personales que de otro modo sería improbable que ocurriera.

Este proceso es tan fácil y tan difícil como fascinante. Y una vez más, nuestro núcleo pensador, el cerebro, es el culpable de ello. Reír provoca una mayor liberación de endorfinas, hecho que favorece que nuestro estado de euforia se dispare.

De forma encadenada, este sentimiento nos genera un mayor estado de desinhibición.

No quiero decir que tengamos que morirnos de la risa en todo momento (ojalá fuera así), sino que es importante pensar en la sonrisa ese elemento gratuito y maravilloso que poseemos para usar cuando queramos.

Puedes completar este post con este otro anterior: La sonrisa como herramienta estratégica.

Sonreír es una señal de apertura ante los demás, una puerta que abrimos y que representa un impacto emocional muy potente

Es parte de esto que entendemos como comunicación no verbal, pero recuerda esta frase que tanto me gusta: todo comunica. Todo comunica y nada como una sonrisa para comunicar.

La sonrisa hace que todo parezca más fácil y nos induce a la actitud positiva, como ya vimos en el post que te recomendaba arriba. Conexiones positivas y enlaces emocionales que se generan gracias a nuestras neuronas espejo.

Todo nuestro sistema reacciona ante la sonrisa, la respiración, la tensión, los nervios… es como si todo nuestro intrauniverso confabulara para prepararnos a compartir cosas con los demás. Ahora piensa si todo esto tiene sentido y si puede ayudarte a mejorar aspectos de tu comunicación.

Photo credit: getinspirationfromquotes