El hashtag es una etiqueta simbolizada por el signo de almohadilla que nos sirve para identificar una palabra que consideramos clave dentro de un mensaje en redes como Twitter, Instagram o Facebook y ayudarnos, tanto al sistema como al usuario, a identificarla de forma rápida. Hoy te propongo un reto: Llévate el hashtag a otro contexto!
Estamos acostumbrados a verlo en estos formatos de redes sociales, pero ¿qué pasa si lo sacamos de su hábitat natural y lo empezamos a usar en otros formatos tanto online como offline?
Sin abusar de ello, puede ayudarnos a matizar algún concepto específico que nos interese
Por ejemplo, en un email. ¿Por qué no destacar aquella palabra que resulta vital para nosotros en el cuerpo de texto y asociarle la almohadilla simulando o provocando un hashtag?
O, imagina que eres profe y que en tu presentación (también sin abusar) utilizas el hashtag para destacar aquello que merece la pena destacar. Incluso yendo más lejos todavía es muy útil que alguna definición importante de tu presentación la construyas en forma de tuit incluyendo un hashtag para provocar que tus alumnos lo puedan compartir aquí y ahora (gracias al efecto inmediatez).
En un trabajo de fin de carrera o de fin de Master también podemos buscarle su hueco al hashtag y pensar si tiene sentido utilizarlo y si realmente nos aporta valor. Por supuesto, en algún anuncio publicitario para una revista, valla publicitaria o mupi también puede adquirir relevancia y protagonismo.
Igualmente en un catálogo de producto o incluso en tu tarjeta física de visita puede darte esa chispa creativa y llamativa que siempre estamos buscando. Si te llevas el hashtag a otro contexto ya solo por eso puede que consigas esa llamada de atención.
Ahora, como siempre, te toca a ti pensar si tiene sentido hacerlo. Hasta en tu estado de Whatsapp puedes destacar algo que para un momento puntual sea importante para ti y te interese dar a conocer a los demás. Sorpréndenos!
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