Decimosexta entrada de la serie dedicada a los ODS, en la que estamos viendo de manera individual en qué consisten. Tras el ODS 15, Vida de ecosistemas terrestres, es turno del Objetivo de Desarrollo Sostenible: Paz, justicia e instituciones sólidas.
Los conflictos, la inseguridad, las instituciones débiles y el acceso limitado a la justicia siguen suponiendo una grave amenaza para el desarrollo sostenible. El número de personas que huyen de las guerras, las persecuciones y los conflictos superó los 70 millones en 2018, la cifra más alta registrada por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en casi 70 años.
Objetivo de Desarrollo Sostenible 16: Paz, justicia e instituciones sólidas
En 2019, las Naciones Unidas registraron 357 asesinatos y 30 desapariciones forzadas de defensores de los derechos humanos, periodistas y sindicalistas en 47 países. Son cifras que no deberían existir. Pero lo más dramático es que vivimos situaciones tan indeseables como los conflictos bélicos que generan más crisis humanitarias.
Por otro lado, los nacimientos de alrededor de uno de cada cuatro niños en todo el mundo con menos de 5 años nunca se registran de manera oficial. Un dato llamativo, que les priva de una prueba de identidad legal: esta prueba resulta determinante para la protección de sus derechos y para el acceso a la justicia y a los servicios sociales.
Sin duda, este es uno de los ODS con mayores dificultades y más necesidad a la hora de entrar situaciones reales y efectivas.
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