Los cuatro pilares de la creatividad son: fluidez, flexibilidad, originalidad y elaboración. Estos componentes, interconectados y esenciales, permiten que nuestra mente produzca ideas innovadoras y soluciones efectivas. Comprenderlos es clave para alimentar y expandir nuestra creatividad.
La creatividad es un recurso valioso y, al igual que cualquier otra habilidad, mejora con la práctica y la dedicación. Así que, la próxima vez que te enfrentes a un desafío que requiera creatividad, recuerda estos cuatro pilares y deja que te guíen en la búsqueda de soluciones brillantes e innovadoras.