Seguro que alguna vez has escuchado que el marketing ha muerto. Y, ¿te has preguntado alguna vez por qué se dice que el marketing ha muerto?
Esto mola y mucho. Hay varios motivos que he ido recopilando y que van aportando datos a esta tesis.
Se dice que el marketing ha muerto porque cuando algo dura demasiado nos encargamos en matarlo, sobre todo en nuestro país, lo eterno cansa y necesitamos novedades.
También se dice que ya no se lleva, que hay que reinventarlo y que está obsoleto. Quizás se refieran al marketing tradicional, o puede que no. Quizás un nombre más bonito venda más (esto también sería marketing). ¿Hacemos un naming para ver cómo le llamamos ahora? Puede que dentro de unos años, conforme ocurre con esto de las reediciones, alguien lo vuelva a poner de moda, como las gafas de pasta.
Si el marketing ha muerto, ¿por qué tanta gente adopta y adapta la palabra para definir sus servicios?
Otra manera de verlo es que para alimentar otras utopías es necesario cargarse las que las sostienen. Me explico. Las nuevas ciencias, adheridas sobre todo al comportamiento, las hablidades y conocimiento humano, necesitan abrirse paso e implantarse en las empresas, a través de las personas. Todo ello provoca que el sistema se tambalee y parezca que el malo de la peli es el marketing.
Además, decir que el marketing ha muerto mola, porque de pronto parece darte un matiz interesante de sabiduría por encima de los demás. Si quieres hazlo, me encanta la libertad y que cada persona decida lo que quiere hacer.
Hoy he ido al cementerio a hacer una visita al marketing. Debe ser que era de día, pero su tumba estaba vacía. Allí no estaba. Al salir, le he visto, correteando como siempre y quizás más activo que nunca. Creo que debe ser un zombie, que resiste a la muerte y disfruta de la vida. ¿Hay algo más creativo que un zombie? Así es el marketing que yo conozco.
Photo credit: igaveyoudevils