Precios grandes, precios pequeños. ¿El tamaño importa?

Hoy quiero hablaros sobre estrategias de pricing, gracias a una situación vivida in situ ayer: Precios grandes, precios pequeños. ¿El tamaño importa?

El concepto pricing hace alusión al método que determina aquello que una empresa va a recibir por sus productos o servicios.

Es algo así como “el arte y la ciencia de comprender cuánto está dispuesto a pagar alguien por un producto o servicio, intentando obtener el máximo posible de este”.

Vaya, de forma sencilla, nos referimos a la fijación de precios.

Como es un tema clave dentro de la estrategia de marketing, os refresco unos cuantos post anteriores que os serán de utilidad:

El pricing y su importante papel en la estrategia de marketing (clic aquí para leer)

Sensibilidad al precio en la estrategia de marketing (clic aquí para leer)

Surge pricing o tarifas dinámicas de precios en la estrategia de marketing (clic aquí para leer)

El efecto anclaje y su papel en la estrategia de precios (clic aquí para leer)

Curiosidades en percepción de precios por parte del consumidor (clic aquí para leer)

Estrategia de precios: lo barato sale caro (clic aquí para leer)

5 libros para entender mejor los precios (clic aquí para leer)

7 aspectos clave para la fijación de precios en servicios (clic aquí para leer)

Precios grandes, precios pequeños. ¿El tamaño importa?
Precios grandes, precios pequeños. ¿El tamaño importa?

Precios grandes, precios pequeños. ¿El tamaño importa?

Bueno, ahora si, al grano. En el día de ayer, yendo de compras, pude comprobar algo curioso sobre el tamaño en el que se muestran los precios.

Sin citar el lugar, lo interesante es que vamos a hablar sobre una estrategia de precios concreta.

En ella, se juega con el tamaño de los precios. Los euros en grande y muy visile. En pequeño, los céntimos y muy poco visibles.

En la foto podéis ver tres precios de tres productos diferentes: 12, 13 y 6 euros.

Pero no se si veis los céntimos, en plan superíndice, que muestra la cifra de 99 céntimos.

La conclusión es que en lugar de 12, 13 y 6 euros, estamos hablando mas bien de 13, 14 y 7 euros.

Es un simple truco, una estrategia. Pero funciona. ¿Por qué?

Nuestro cerebro se quedará con la primera cantidad que ve y se autoengañará diciendo que es ese el coste real del producto, cuando en realidad será casi un euro superior.

Photo credit: SM

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