Retomo el tema de un post anterior sobre rebranding como proceso estratégico de gestión de marca (2).
Las marcas, al igual que los humanos, ven pasar el tiempo ante sí y por tanto ven llegar a generaciones de consumidores que vienen con otras ideas, pensamientos y comportamientos.
También, las marcas van creciendo y cambiando hábitos, creando nuevos productos o servicios, adaptándose a las nuevas condiciones de los mercados, etc.
Todo ello hace que debamos replantearnos como marcas si nuestra imagen está en coherencia con el momento actual del mercado y con las previsiones futuras.
Renovación! Esto conlleva, como sabes, dar un aire renovado y fresco a logotipo, eslogan, etc.
Por tanto, ¿qué es el rebranding? Dicho de forma clara y sencilla es actualizar una marca.
Rebranding como proceso estratégico de gestión de marca (2)
Esto tienes sus ventajas y sus riesgos, ya que por una parte seguramente existe necesidad de cambio, pero por otra henos de valorar el coste de esta estrategia
Por tanto, algo resultará fundamental: no caer en un error de posicionamiento de marca, dado el cambio.
Es el momento de invitarte a leer unos post anteriores sobre errores a evitar en el posicionamiento de marca:
- Errores a evitar: infraposicionamiento
- Errores a evitar: sobreposicionamiento
- Errores a evitar: posicionamiento confuso
- Errores a evitar: posicionamiento dudoso
¿Qué debemos tener en cuenta para iniciar un proceso de rebranding?
- ¿Qué quiero transmitir ahora con mi marca a mi target?
- ¿Cómo quiero transmitirlo?
- ¿Por qué voy a cambiar mi imagen?
Seguramente un buen planteamiento funcional y emocional que determine los porcentajes que vamos a equilibrar para cada parte resultará fundamental.
Una vez más, lo racional frente a lo irracional y cómo creamos ese arte que nos permita saber cuál es el mejor planteamiento posible dado lo que ya tenemos.
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