Puñetazos emocionales en la red

Como suena el título, eh? Rotundo. Hoy quiero hablar de los puñetazos emocionales en la red. Internet es ese lugar maravilloso que nos han regalado y del que podemos aprender mucho, sobre todo en la parte de conexión de personas y por tanto en la conexión emocional con las personas.

Nada es más contundente y decisivo que una comunicación emocional

Esa que nos empuja a través de un estímulo, a tomar una decisión y finalmente generar un recuerdo. Quizás te interese consultar este post anterior sobre esta secuencia: Estímulo, emoción, decisión y recuerdo.

Esta semana ha sido para mí muy intensa en lo emocional, si has seguido mi actualidad seguramente sabrás por qué. No es momento de volver a hablar de ello, sino para contar lo que he aprendido de todo ello, pues como bien sabes la vida es un aprendizaje continuo.

Gracias a internet y sobre todo a las redes sociales he podido expresar mis sentimientos de alegría y de querer compartirla con los demás. Analizando me doy cuenta de que puedes publicar contenidos que consideras de gran valor y obtener una repercusión «correcta». O incluso baja, en base a las expectativas que tienes. Sin embargo, puede que tengas una repercusión fuera de lo común con una sola imagen acompañada de un texto emotivo dando una noticia emocionante.

Expresar las emociones es hoy más fácil que nunca
Expresar las emociones es hoy más fácil que nunca

Te dirás a ti mismo que esto es lógico y lo es. Pero aprendiendo del trasfondo quiero destacar que el componente irracional de la emoción hace que la velocidad de la toma de decisiones se multiplique por mucho, nos dejamos llevar por el clima de felicidad y nos sumamos a lo positivo.

Es más que probable que con la foto que he elegido estratégicamente alguna chica (y también algún chico) clique me gusta cuando lo comparta en Facebook sin siquiera haber leído este post. Somos así, emocionales e irracionales y eso es maravilloso.

Que bonito es aprender de esto, aprender que como seres humanos estamos hambrientos y sedientos de buenas noticias, de caras felices y de alegrías. Precisamente por esto, piensa si tienes algún motivo de felicidad que compartir y si te apetece hacerlo, piensa en las expectativas que te puedes generar pensando en qué tipo de repercusión tendrá y luego compruébalo.

Vuelvo a darte las gracias por leerme, escucharme y poder compartir contigo todo lo que pienso.

Photo credit: myfanfiction

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