Segundo post de la serie dedicada a los diferentes tipologías de signos gráficos para identidad visual. Es el turno del indicio.
Un indicio hace referencia a un signo determinado por su objeto dinámico, en virtud de la relación real que mantiene con él.
Sería el carácter, la pista o el descubrimiento que carece de sentido pero da un rastreo objetivo y cognitivo de la idea planteada en el enunciado.
El indicio se correspondería con la secundaridad. Es un signo que se encuentra contiguo al objeto denotado.
Por ejemplo, ocurre en la aparición del síntoma de una enfermedad, en el descenso del barómetro o en la veleta que indica la dirección del viento.
Otros ejemplos serían el humo del fuego, el relámpago de una tormenta, una nube oscura de lluvia o la fiebre que muestra la enfermedad.
Tipologías de signos gráficos para identidad visual: Indicio
En definitiva, el indicio es un tipo de signo natural que establece una relación entre el significante y el significado.
Veamos un ejemplo secuencial: si vemos una huella animal (significante), ésta podría aludir a un tigre (referente), lo que a su vez nos plantearía una situación de peligro (significado).
En un indicio está presente, en cierto modo, aquello que se representa.
Aunque en realidad no se muestra como tal, sino por medio de una asociación o relación.
Por tanto, a partir de aquello que percibimos deducimos alguna cosa. El significado tiene relación natural causa-efecto.
Estamos acostumbrados a escuchar este término en escenarios como series, películas, libros, informativos, etc.
Esta figura es un indicador, al fin y al cabo, de algo que arranca bajo esa perspectiva y que abre un abanico de posibilidades por descubrir.
Aplicado a una marca, un elemento bien trabajado puede representar un elemento interesante dentro de la identidad visual.
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