Pensar las 24 horas del día en café. Esa es la carta de presentación de Cafés Templo, una marca que apuesta por el origen, la dedicación, el sabor y la sostenibilidad. Entender cada pequeño detalle en este segmento de mercado es importantísimo.
Con un gran conocimiento del proceso, Templo logra la extracción de un gran café. Sin duda, ésta es su razón de ser, la que pone al café como epicentro de todo.
Hablamos de origen
Su café proviene de las plantaciones más prestigiosas del mundo, entre las que destacan las ubicadas en América y el Caribe. Cada una de sus propuestas de producto posee un carácter único, asociado a cada región. Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala. Hawaii, Honduras, Jamaica, México, Nicaragua, Panamá y Perú en Sudamérica. Etiopía, Kenia y Ruanda en África. Vietnam, India y Sumatra en Asia.
Debemos destacar la dedicación
Mimar el producto en este sector es otro aspecto clave. Plantar, cuidar y cultivar el café requiere de mucho mimo diario, para que el producto llegue hasta la taza en su máxima expresión. Sólo los granos verdes de mejor calidad son los elegidos para ser tostados en todo el mundo.
Cafés Templo, origen, dedicación, sabor y sostenibilidad
El sabor es innegociable
En su tienda online (visitar aquí) hay disponible una amplia oferta de café. He tenido la oportunidad de probar varios de ellos y son excelentes. Os recomiendo los cafés de especialidad (Myanmar, Papua y Uganda), el café americano y las cápsulas compatibles con Nespresso. Además, cuenta con una interesante gama de café ecológico.
Sostenibilidad, un compromiso ineludible
La marca dispone de exigentes credenciales éticas, como Fairtrade y Agricultura Ecológica. Esto aporta la seguridad de saber que la sostenibilidad y el compromiso ético es fundamental. Un compromiso para alcanzar un concepto de café sostenible.
Os invito a seguir su cuenta de Instagram (clic aquí) donde podemos ver toda la actualidad de la marca.
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